Ácido Hialuronico
¿Qué es el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico es una sustancia natural que está presente en nuestro organismo de forma habitual. Con el paso de los años, el ácido hialurónico que poseemos en la dermis se va perdiendo, reflejándose externamente con la aparición de arrugas y la pérdida del contorno del rostro. Para disminuir su pérdida progresiva es posible aportar de forma externa ácido hialurónico mediante microinyecciones en dermis. Este aporte permite hidratar la piel, reponer el volumen perdido y eliminar las arrugas de una forma sencilla y discreta.
Existen dos tipos:
- Ácido hialurónico reticulado:
El Ácido hialurónico reticulado sirve para dar volumen o para "rellenar" debido a su gran consistencia, permite atenuar arrugas estáticas, es decir, las arrugas que aún se ven cuando el rostro está en reposo, sin gesticular. También se utiliza para devolver volumen a las zonas en las que se perdió debido al proceso de envejecimiento, como mejillas, mentón y mandíbula.
Hay diferentes densidades en función de la proyección que queramos conseguir y las características anatómicas concretas de la zona. Al igual que el ácido hialurónico no reticulado, también tiene una gran capacidad de retención del agua.
Con el uso de esta técnica de relleno facial es posible lograr un cambio en el aspecto del rostro de forma rápida, poco dolorosa y segura. Todo esto con el fin de recuperar la tonalidad y el aspecto liso y tenso de la zona tratada de una forma natural.
Este tipo de ácido hialurónico es ideal para:
- Aumento o perfilado de labios con ácido hialurónico.
- Relleno de surcos nasogeneanos
- Como relleno de ojeras para eliminar la hendidura bajo los ojos a causa del envejecimiento.
- Para rellenar las arrugas estáticas y profundas.
- Para aumentar los pómulos o menton.
- Como relleno de la zona malar, que es la zona donde primero se pierde la grasa al envejecer.
- Marcación mandibular para definir la línea de la mandíbula y/o el mentón cuando está un poco retraído.
- Ácido hialurónico no reticulado:
Se trata de un ácido hialurónico más ligero, que no destaca por aportar volumen sino que su aplicación común es para conseguir una hidratación profunda. Para intensificar y ampliar sus beneficios se puede combinar con otras sustancias como ciertas vitaminas y emplearlo en mesoterapias faciales o corporales.
- Hidratación y luminosidad en rostro
- Rejuvenecimiento e hidratación de manos, pies y escote.